Liderar como mujer en Punta Cana ha sido un camino de crecimiento, decisiones valientes y aprendizaje constante. En un entorno turístico y empresarial en pleno auge, donde aún predominan figuras masculinas, posicionarse como mujer líder requiere más que preparación: exige determinación, visión y autenticidad.
Desafios:
He enfrentado desafíos como ganarme el respeto en mesas de negociación, equilibrar mi vida personal sin apagar mi esencia femenina, no descuidar mi familia y mantenerme firme en mis valores cuando el entorno me empujaba a adaptarme.
También entre las oportunidades valiosas que he descubierto están:
Oportunidades:
-
Conectar con una comunidad diversa e internacional
-
Crear propuestas con propósito y sensibilidad humana
-
Inspirar a otras mujeres a liderar desde su autenticidad
-
Aportar una mirada integral al desarrollo de proyectos en la región
Liderar en Punta Cana siendo mujer es, para mí, una forma de dejar huella. No solo construyendo empresas, sino aportando a la sociedad y abriendo caminos para otras mujeres con ganas de empoderarse y con sueños de lograr grandes cosas.
Porque el liderazgo femenino no es una tendencia, es una fuerza en expansión.